domingo, 1 de julio de 2012

Es necesario regular contenidos en horario de protección al menor.


Las numerosas organizaciones que conforman la Coalición por una Comunicación Democrática, apoyan la discusión de la necesidad de marcos normativos para regular distintos fenómenos de la comunicación, que se enmarca en la relación de éstos con la sociedad en su conjunto y en la ausencia de políticas públicas y estímulos para los medios de comunicación.
En ese sentido la Coalición por una Comunicación Democrática reivindica el proceso desarrollado en el Comité Técnico Consultivo de la Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual que, por primera vez, permitió discutir en forma participativa y amplia una política integral para los medios audiovisuales.
En ese contexto, las organizaciones que integran la Coalición propusieron y siguen proponiendo una regulación que garanticé la libertad de expresión en los medios, pero que respete los derechos de sectores vulnerables, en cumplimiento con las convenciones internacionales de derechos humanos que aprobó el país referidas a niñez, género, discriminación sexual o por razones de raza, personas con discapacidad, etcétera.
En lo que refiere a la medida propuesta por el gobierno para proteger a niños y niñas de los contenidos de violencia explícita. Entendemos que es necesario ubicar la reflexión sobre esta medida en particular, en el marco más amplio relativo a la regulación de medios y su relación con la infancia y la adolescencia. 


La relación de niños, niñas y adolescentes con los medios de comunicación y las pantallas en particular, constituye un elemento central para las democracias actuales. A la hora de pensar en fortalecer mecanismos y ámbitos de convivencia esta relación adquiere particular relevancia y requiere una regulación integral que abarque el horario de protección al menor, contenidos inadecuados, producción de contenidos y educación para los medios, entre otros capítulos.

Este no es un asunto solo del gobierno, aunque es su responsabilidad. Debatir y acordar socialmente qué tipo de relación quiere la sociedad uruguaya establecer entre sus niños y sus medios de comunicación, requiere ineludiblemente la activa participación de empresarios de la comunicación, de trabajadores y profesionales de los medios, de la academia, de las organizaciones de la sociedad civil y por qué no, de los propios niños, niñas y adolescentes.

En cuanto a los contenidos de violencia extrema, de carácter sexual, discriminación por razón de género o raza, etcétera, que emite a diario la televisión y que afecta a las audiencias en general, cabe similar reflexión. Es posible establecer un marco regulatorio que sancione con posterioridad a la emisión, aquellos contenidos ofensivos por estas razones, todo lo cual requiere reglas claras, una institucionalidad independiente y una defensoría de las audiencias que debería establecerse por ley.

La Coalición reafirma su compromiso con los espacios de participación que se convoquen para discutir y debatir sobre la política de comunicación y aguardamos que el Poder Ejecutivo cumpla con su anuncio de enviar al Parlamento el proyecto de Ley de Servicios de Comunicación Audiovisual (LSCA).

Marihuana



Fuente: http://www.infodrogas.gub.uy


Calzada aclaró que el Gobierno busca separar mercados y evitar el “efecto góndola”

En diálogo con la prensa, el titular de la Junta Nacional de Drogas, Julio Calzada,  dijo, en referencia a lo que será el proyecto de ley para la regulación de la venta de marihuana, que lo importante es que exista un debate que seguramente se extenderá hasta luego de aprobada la ley. Recordó que esta discusión lleva años, pese a que el actual es un momento de inflexión generado por la decisión del Ejecutivo de impulsar estas medidas.

“No es un debate aislado, está en el marco de un conjunto de acciones que se vienen realizando a nivel nacional e internacional,  tanto con la presentación de proyectos de ley como con los planteos realizados por varios presidentes", explicó. “Lo diferente es que existe una clara voluntad política de llegar a una solución”, añadió. Calzada también dijo que seguramente será
una ley consensuada en el Parlamento y que tendrá mayorías.

“Después de 100 años de aplicado cierto tipo de políticas, lo único que se nos ofrece por parte de un conjunto de actores es más de lo mismo y vemos que este conjunto de políticas ha fracasado en el mundo. No lograron disminuir el consumo, la producción se acrecentó sustancialmente en todos los rubros, se agravó la situación sociosanitaria de los usuarios, se desató a nivel mundial el crimen organizado”, opinó.

“Todos quienes se expresan en relación a esto deben dar una solución, sino es más de lo mismo, más muertos, menos personas que acceden a los servicios sanitarios, más dificultades de integración social. Nosotros estamos proponiendo una alternativa, quienes dicen ‘más de lo mismo’ no proponen ninguna”, puntualizó

Calzada aclaró que no se expresó definidamente en contra del autocultivo, sino que cualquier iniciativa tiene que tener una estricta regulación del Estado. Según expresó, el Poder Ejecutivo quiere garantizar a la ciudadanía que no habrá incremento del "mercado negro". 
Con la medida propuesta se podría “regular la calidad de la sustancia que circula en el mercado y separar el mercado del cannabis del de otras drogas que son por sus características más perjudiciales para la salud, en lo social y de seguridad”, dijo.

Aclaró que no consideran que el consumidor de pasta base se irá al mercado de la marihuana porque son dos sustancias que tienen características diferentes, una es energizante del sistema nervioso central que lo activa y otra es una sustancia que deprime. No obstante esto, los consumidores de pasta base son policonsumidores. “Lo que buscamos con esto es separar los mercados y en un futuro eliminar o atacar fuertemente lo que es el efecto góndola que es cuando un usuario de marihuana va a una boca a buscar y se encuentra con que no hay, pero le ofertan pasta base y se termina llevando esa droga”, relató.

Para concluir, recordó que desde 2006 el Gobierno trabajó en la regulación del mercado del tabaco, está haciendo lo mismo con el alcohol y busca hacerlo con otros mercados, con sustancias que alteran la conciencia y que deben ser controladas, con una participación activa.

La revista "Time" destacó la propuesta de Mujica para legalizar la marihuana



Time, la influyente revista norteamericana, publicó esta semana en un articulo titulado “El plan de Uruguay para legalizar la venta de marihuana, ¿el mundo podría seguirlo?", una mirada favorable a la medida impulsada por el gobierno de José Mujica.
"La propuesta de Uruguay de legalizar la venta de marihuana y de transformar al gobierno en su único vendedor, refleja una creciente necesidad global de encontrar nuevas y menos violentas soluciones para una vieja y mortífera guerra", indicó el periodista autor de la nota, Tim Padgett.
El artículo cuenta que "la semana pasada, Uruguay, un país sudamericano pequeño y estable, propuso legalizar y monitorear la venta de marihuana, convirtiendo al Estado en su único vendedor legal". Asimismo, indica que "el propósito de esta ley sin precedentes, que el presidente José Mujica califica como una medida anticrimen, es ganarle la partida al mercado negro, muchas veces violento, donde la marihuana es comúnmente vendida (el consumo es legal en Uruguay) y canalizar los U$S 750 millones que los consumidores de marihuana gastan por año hacia las arcas del Estado".
El artículo afirma que la propuesta, "que todavía tiene que pasar por el Parlamento, es la primera en aparecer tras la última Cumbre de las Américas de Colombia, donde el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, y otros presidentes latinoamericanos expresaron a Estados Unidos que la política de control de narcotráfico que Washington defiende obstinadamente no sirve más y que hay que probar nuevas medidas, incluyendo la legalización de la marihuana".
La revista cita además la posición del ministro de Defensa, Eleuterio Fernández Huidobro, quien argumentó que "el espiral de violencia relacionada a la droga en regiones como América Latina, sumado a los altos costos de la lucha contra las drogas a nivel global, puede llevar a una crisis mayor a la de las drogas en sí mismo".
"El argumento planteado por el gobierno uruguayo ha crecido en las encuestas en Estados Unidos", informó Time en su artículo.
"Actualmente la mitad de los estadounidenses apoya la legalización de la marihuana, alegando que no es más dañina que otras drogas legales como el alcohol o el tabaco, si es consumida moderadamente. Actualmente el tráfico de marihuana genera la mitad de las ganancias de los carteles de droga mexicanos, que tantas muertes ha causado", escribió Padgett.
El artículo describió también el plan del gobierno uruguayo, destacando que para comprar la marihuana se deberá tener al menos 18 años y que el Estado ejercerá estrictos controles de calidad y de precio, además de destinar las ganancias a programas de rehabilitación para adictos.
A nivel mundial, explica Padgett, los estudios han concluido que la experiencia de Portugal de descriminalizar la marihuana ha tenido efecto, y que esa sustancia no es una droga de apertura hacia el consumo de sustancias más fuertes. "Pero el transformar la industria a control estatal nunca se ha probado", aseguró el periodista quien sostuvo además que "hubiera sido mejor que Mujica propusiera un entorno legal, pero a cargo de un sector privado fuertemente controlado por el Estado, en la cual el gobierno solo obtuviera ganancias por impuestos".
Según el autor, en la última década Uruguay ha probado ser uno de los países más competentes de América Latina con "una de las economías más fuertes y un índice de desarrollo humano" que se encuentra entre los más altos del continente.
Por último, citando a Mujica, el autor indicó que este tipo de experimentos es mejor hacerlos en países chicos como Uruguay y Portugal, ya que sirven como laboratorios controlados para que países más grandes realicen sus estudios al respecto.
"El gobierno de Estados Unidos, y probablemente la ONU, estén molestos por la jugada de Mujica, ya que han rechazado enfáticamente el llamado latinoamericano de la legalización de la marihuana. Pero por otro lado el mundo está cansado del status quo, y está dispuesto a probar nuevas y menos violentas soluciones a la vieja guerra de las drogas", finaliza el artículo.